Fotografía submarina: características, técnicas y equipo

La fotografía submarina, o fotosub, engloba todos los tipos de fotografías tomadas bajo el agua. Esta disciplina combina las técnicas del buceo y de toma de imágenes. Se puede hacer a pulmón, con snorkel o con botella de oxígneno. A continuación, te contamos sus particularidades.

¿En qué consiste la fotografía submarina?

Esta disciplina requiere un buen dominio del buceo y de la fotografía, aunque también es importante contar con un material resistente a la presión bajo el agua. En ese entorno, la refracción modifica todos los parámetros de la toma de imagen. Este efecto físico y óptico ocasiona una diminución de la luminosidad, del ángulo de campo del objetivo y del cálculo de las distancias. Aunque la máscara y la ventanilla de la caja estanca permiten observar nítidamente en un medio acuático, no pueden suprimir este efecto.

¿Cuáles son las características de la fotografía submarina?

Iluminación: en un medio acuático, la iluminación se convierte en un desafío. Entre la profundidad, la opacidad del agua, las corrientes y las partículas, la toma de una imagen puede ser un verdadero dolor de cabeza para el fotógrafo que no conoce a perfección su equipo y las limitaciones de este tipo de fotografía. Por ejemplo, cuanto más se desciende, más disminuye la luminosidad. Además, un mar agitado deja traspasar menos luz por su superficie, haciendo que la toma sea bastante difícil de realizar. La reflexión también representa una limitación ya que cada elemento que funciona como reflector bajo el agua reduce, al mismo tiempo, la luminosidad en profundidad.

Los colores: los colores también sufren modificaciones importantes a mayor profundidad. Mientras más desciende el fotógrafo, mayores son los colores dominantes y fríos. Para compensar la desaparición de colores cálidos, el fotógrafo puede recurrir a una post edición digital, pero también puede recurrir al uso de filtros UR Pro los cuales reviven el rojo y el naranja logrando compensar esta pérdida de colores.
Los efectos del objetivo: además de las importantes consecuencias en la iluminación y los colores, el agua también tiene un efecto físico en el comportamiento de la lente de la cámara. Por ejemplo, la refracción disminuye el ángulo de campo del objetivo, un 35 mm cubrirá un campo equivalente al de un 50 mm. Del mismo modo, la estimación de las distancias es modificada, sobre todo debido a la sensación de un aumento de los sujetos (efecto lupa). La profundidad de campo también es reducida debido a este efecto.

¿Qué técnicas se aplican para fotografiar bajo el agua?

Atraer a los peces: no es fácil fotografiar estos seres vivos y muchas veces temerosos. En lugar de espantar a los peces acercándose a ellos, atráelos con un poco de pan o abriendo por la mitad un erizo de mar.
Primer plano: se puede utilizar un objetivo macro para los pequeños detalles o un objetivo estándar para fotografiar la multitud de seres atípicos e interesantes que abundan en las profundidades. Acercarse al sujeto es una buena opción cuando el agua se presenta turbia.
Marcar la localización: es importante hacer marcas, conocer los lugares de fauna abundante o dónde realiza su rutina la población acuática. Conocer estas reglas del buceo son importantes, sobre todo si eres un principiante en la fotografía submarina.

¿Cuál es el equipo necesario en la fotografía submarina?

La caja estanca: diseñada para proteger del agua la cámara fotográfica. Este elemento puede fabricarse en carbono, policarbonato o aluminio. Las juntas tóricas vuelven esta caja totalmente impermeable. Además, su resistencia permite descender a gran profundidad sin que tu equipo sufra daños. En el caso de las cámaras réflex, una ventanilla adaptada al objetivo se coloca en la parte delantera de la caja estanca. Esta ventanilla posee diferentes anillos que permiten realizar los ajustes del objetivo (apertura de diafragma, selección de la distancia focal y enfoque).
Iluminación artificial: por lo general, se requiere un aporte complementario para iluminar la escena a fotografiar. En este caso, el flash permite obtener una alta potencia sin aumentar mucho el volumen del equipo. Los flashes adaptados y herméticos, diseñados para diversas marcas, son muy vendidos. Asimismo, es indispensable contar con un brazo articulado que quede fijo en la caja estanca. Este brazo permite desplazar el flash desde el eje óptico.
Los filtros correctores: como ya hemos señalado líneas arriba, el uso de un filtro UR Pro compensa la presencia de tonos dominantes, fríos y omnipresentes bajo el agua. Este filtro permite recuperar los tonos cálidos como el rojo y el naranja. Este dispositivo se coloca delante de la ventanilla de la caja estanca.
Cámaras compactas: algunos fabricantes ofrecen cámaras compactas con carcasa. Estas cámaras resisten filtraciones que las cámaras no adaptadas no pueden resistir y te permiten usar e intercambiar lentes húmedas (acopladas a la carcasa) sin salir del agua.
Cámaras anfibias: están selladas y son resistentes al agua hasta cierta profundidad, aunque su hermeticidad tiene límites ya que, por lo general, las cámaras resisten hasta 3 ó 5 metros de profundidad. También se les puede incorporar una carcasa y someterlas a mayor presión/profundidad.