¿Cierro o dejo abierta la puerta de la lavadora? Consejos para protegerte contra el moho
¿Debo cerrar o dejar abierta la puerta de la lavadora? Quizás conozcas la respuesta, pero no te apresures a pasar a otra página. Hay algunos matices que no todo el mundo sabe, pero conocerlos le dará a tu máquina muchos años de vida.
Para que tu lavadora dure más y no tengas que repararla o comprar una nueva, basta con seguir reglas simples pero muy importantes para su mantenimiento, no solo cuando está encendida y en función, sino también cuando está "en reposo". Muchas personas abren deliberadamente la puerta de la lavadora después del lavado para secar el tambor y evitar así la formación de moho.
Y es cierto, después del lavado, el agua del tambor incluso en los modelos más modernos no se drena del todo y queda algo de humedad. Además, queda agua en la bomba de drenaje, en el sello y en el tambor. Por lo tanto, una vez finalizado el lavado, se debe dejar abierta la puerta de la máquina. Así podrás ventilarlo y evitar la formación de bacterias, hongos y olores desagradables en el interior de la lavadora.
Sin embargo, hay un detalle importante. Si abres mucho la puerta de la lavadora, con el tiempo las bisagras de esta puerta comenzarán a hundirse y en algún momento no podrás cerrarla. Tendrás que reparar tu lavadora. Por tanto, es recomendable dejar la puerta de la lavadora entreabierta entre 5 y 10 cm, no más.
Aquí te damos algunos consejos más que te ayudarán a evitar la formación de hongos, moho y olor a humedad en el tambor de la lavadora y en la bandeja del detergente.
- Limpia periódicamente los pliegues interiores de la trampilla de la lavadora con un paño suave y detergente líquido. Aquí es donde se acumulan muchos residuos de suciedad.
- Cada vez que termines el lavado, saca la bandeja del detergente y déjela abierta también. De esta forma no se formará moho en él y la máquina quedará bien ventilada y seca. Para el momento del próximo lavado, este compartimento debe estar seco.
- Si las características de diseño de tu lavadora lo permiten, a veces es bueno sacar la bandeja para el detergente, enjuagarla y secarla con un paño.
Siguiendo estos sencillos procedimientos protegerás tu lavadora de bacterias y moho. Y una cosa más, no olvides limpiar periódicamente el filtro de la lavadora para evitar que se obstruya. ¡Y disfruta de una ropa fresca y limpia!