La regla 20-20-20 puede salvarle la vista: 7 claves para proteger tus ojos en invierno
Los meses de invierno pueden ser un reto para nuestros ojos debido al aire frío, la calefacción interior y el mayor tiempo que pasamos frente a las pantallas. Entonces, ¿cómo podemos mantener los ojos sanos durante este tiempo?
Con la llegada de los meses más fríos, el síndrome del ojo seco se convierte en un problema más común e irritante. Alensa, fabricante de lentes de contacto, te ofrece una guía para proteger tus ojos esta temporada.
Los días más cortos y las temperaturas más bajas traen consigo problemas únicos: picor, sensibilidad a la luz e incluso lagrimeo excesivo. Estos síntomas tienen su origen en:
- Calefacción interior seca que desestabiliza la película lagrimal
- Tiempo frío y ventoso que acelera la evaporación de la lágrima
- El resplandor de la luz solar que se refleja en la nieve
- Falta de hidratación y hábitos de uso intensivo de pantallas que sobrecargan el ojo.
"Proteger los ojos durante el invierno no es sólo una cuestión de comodidad, es crucial para evitar daños en la córnea a largo plazo", afirma Boros Mária, optometrista de Alensa. Las lágrimas no son sólo para llorar, sino que protegen, nutren e hidratan los ojos. Sin ellas, los ojos se vuelven vulnerables a la sequedad, las infecciones y la inflamación.
7 consejos para el cuidado de los ojos en invierno
- Utiliza un humidificador: Mantén húmedo el aire interior para estabilizar la película lagrimal y evitar la sequedad. Limpia el humidificador con regularidad o pruebe soluciones sencillas para aumentar la humedad.
- Sigue la regla 20-20-20: Cada 20 minutos, mira algo que esté a 6 metros de distancia durante 20 segundos para reducir la tensión y la sequedad provocadas por la pantalla.
- Come para la salud ocular: Consume alimentos ricos en vitamina A, como zanahorias y verduras de hoja verde. Acompáñalos de grasas saludables (por ejemplo, aceite de oliva) para aumentar la absorción de nutrientes y favorecer una visión clara.
- Utiliza lágrimas artificiales: Las gotas oculares diseñadas para la sequedad alivian y reponen la humedad. Úsalas preventivamente en ambientes secos.
- Ponte gafas de sol de invierno: Los rayos UV son nocivos durante todo el año, y el resplandor de la nieve puede irritar los ojos. Invierte en gafas de sol que bloqueen los rayos UV para mantener tus ojos cómodos y sanos.
- Aumenta el consumo de Omega-3: Los ácidos grasos Omega 3, presentes en el pescado, los frutos secos y las semillas, reducen la inflamación y ayudan a mantener la humedad ocular.
- Alterna las lentes de contacto con las gafas: Limita el uso de lentes de contacto para reducir la sequedad. Ten a mano un par de gafas para situaciones en las que las lentillas no sean adecuadas, como durante enfermedades o irritaciones oculares.