Un descubrimiento impresionante en el fondo del océano. "No debería estar aquí"
Los científicos han descubierto que en el fondo del océano hay "baterías" creadas por la naturaleza que producen oxígeno. Este descubrimiento puede cambiar las ideas habituales sobre el surgimiento de la vida en la Tierra.
Un equipo de científicos lleva 10 años realizando investigaciones en las profundidades del mar, estudiando el impacto de la minería en aguas profundas en la biosfera del océano. Mientras realizaban un estudio, descubrieron accidentalmente un fenómeno que podría cambiar nuestras ideas sobre la sustancia más importante del planeta: el oxígeno.
La expedición "ABYSSLINE " de la Asociación Escocesa de Ciencias Marinas (SAMS) realizaba estas investigaciones en la zona de Clarion-Clipperton, en el Océano Pacífico. Mientras medían los niveles de oxígeno en el fondo marino, no podían creer lo que veían. Las lecturas de sus equipos mostraron que a una profundidad de 4.000 metros los niveles de oxígeno comenzaban a aumentar a medida que el aparato de aguas profundas se acercaba al fondo del mar. Debería suceder lo contrario, ya que se considera que en las oscuras profundidades del océano la producción de oxígeno es imposible debido a la falta de luz. Este descubrimiento les llevó a creer que se trataba del misterioso "oxígeno oscuro", que se produce a partir de agua y sin luz.
"Cuando obtuvimos estos datos por primera vez, pensamos que los sensores estaban defectuosos porque todos los estudios realizados en las profundidades del mar solo mostraban el consumo de oxígeno, no la producción de oxígeno. Regresamos a casa y calibramos los sensores, pero al cabo de 10 años estas extrañas lecturas de oxígeno seguían apareciendo", contaron los investigadores.
Después de tomar una muestra de la composición de piedras y rocas del fondo, descubrieron que se trataba de una mezcla de elementos como el cobalto, manganeso y níquel. Llegaron a la conclusión de que estas piedras crean una especie de "batería" natural que lleva a cabo reacciones de electrólisis, como resultado de las cuales el oxígeno se separa del agua.
Este hallazgo confirma la hipótesis de que el oxígeno podría haber surgido en nuestro planeta no sólo como producto de la actividad de las plantas. Resulta que la vida de los animales acuáticos y los microorganismos en grandes profundidades del océano la proporciona el oxígeno que producen estas piedras. Esta idea hizo que los científicos se preocuparan de que la extracción extensiva de estos metales en el fondo del océano pudiera conducir a la destrucción de la vida en sus profundidades.