Científico revela el daño que las pantallas causan en el cerebro de los niños
¿Por qué pasar demasiado tiempo frente a un teléfono móvil, una tablet o un televisor puede afectar negativamente el proceso de crecimiento de un niño? Un neurobiólogo dio una explicación detallada.
Cuando los niños juegan en el smartphone o ven dibujos animados, sus padres tienen momentos benditos para relajarse. Pero, ¿cómo afecta a los niños pasar mucho tiempo delante de una pantalla? Las investigaciones del cerebro humano demuestran que los niños pequeños son especialmente sensibles a las pantallas.
El respetado neurocientífico alemán Martin Korte, autor de una serie de libros sobre el cerebro y el aprendizaje de los niños, compartió los últimos descubrimientos sobre el impacto del tiempo prolongado frente a una pantalla en el cerebro de un niño.
Según él, en los primeros tres años de vida, los niños aprenden a reconocer objetos y distancias, interpretar y categorizar observaciones y asociar experiencias visuales con emociones. Y cuando solo observan imágenes en la pantalla, no interactúan activamente con el mundo que los rodea, es decir, no se mueven, no lo sienten táctilmente y no pueden juzgar distancias.
Pero los niños mayores también se ven afectados negativamente por el tiempo prolongado frente a una pantalla. Como ejemplo, el científico citó un estudio realizado por colegas chinos sobre el comportamiento de niños de cinco a diez años que pasaban varias horas al día frente a las pantallas. Los resultados mostraron que tenían una deficiencia en el desarrollo de los centros del cerebro.
"El movimiento corporal es un poderoso estímulo para el desarrollo del cerebro, que libera sustancias que mejoran la función cerebral. Si los niños no se mueven, pueden ocurrir problemas de desarrollo", resaltó el cientifico.
Además, dijo Korte, es muy importante la interacción con otras personas, que no puede ser sustituida por unos dibujos animados o un videojuego. "Cuando entendemos lo que otras personas sienten y piensan, aprendemos a regular nuestras emociones. Así es como se desarrolla la empatía y la inteligencia emocional."
El neurobiólogo explicó que los centros visuales del cerebro humano se desarrollan junto con centros emocionales como la amígdala, y una estimulación visual excesiva puede provocar fuertes arrebatos emocionales. Por todo ello, es importante que los padres presten atención al tiempo que sus hijos pasan delante de las pantallas.