Seguridad vial: por eso nunca se debe conducir con la ventanilla medio abierta
O la subes, o la bajas. Te contamos por qué nunca debes dejar la ventanilla a medias.
Esta recomendación se volvió viral en las últimas semanas, ya que se trata de una advertencia importante, pero que pocos conocen. Bernat Escolano , que siempre ha trabajado con coches y tiene una cuenta de Instagram con más de 120 mil usuarios, realizó un vídeo advirtiendo a todo aquel que conduzca un coche -sea el conductor o un pasajero- que debe mantener las ventanillas cerradas o abiertas mientras conduce. Es decir, pueden ir en cualquiera de esas dos posiciones, pero nunca a la mitad.
Escolano destaca la importancia de la seguridad relacionada con la posición de las ventanillas del coche y recomienda evitar mantenerlas hasta la mitad, explicando que "podría cortarte la cabeza" en caso de accidente. Se sugiere que, como máximo, permanezcan abiertas a apenas dos dedos de altura para evitar cualquier impacto en caso de un choque grave.
Este consejo es especialmente relevante durante el verano, cuando disfrutar de la brisa fresca en el coche es una sensación agradable, pero puede tener consecuencias peligrosas, afirma.
Además del riesgo de sufrir accidentes graves, como cortes o lesiones, mantener la ventanilla del coche abierta tiene otros impactos negativos. La presencia de ruido externo, la entrada de polvo e insectos, y otras posibles distracciones son algunos de los problemas que pueden surgir a raíz de esto. Además, desde el punto de vista aerodinámico, conducir con las ventanillas abiertas puede aumentar el consumo de combustible, afectando a la eficiencia del vehículo.
Si las ventanas están completamente abiertas, el peligro es aún mayor. Un brazo o una mano que sobresalgan pueden sufrir lesiones graves. Por tanto, la opción más segura, en una época en la que el aire acondicionado está disponible, es mantener las ventanillas completamente cerradas mientras se conduce.
Además de esto, conducir con el codo apoyado en la ventanilla es una imagen habitual en películas y anuncios publicitarios, que evoca una sensación de libertad al volante. Aunque esta postura es muy común entre los conductores, no es una práctica nada recomendable. Otra postura sumamente peligrosa para el copiloto es colocar los pies sobre el tablero. Puede parecer cómodo, pero en caso de choque frontal, las consecuencias pueden ser fatales.