Atención: Tres dispositivos que nunca debes desenchufar
¿Seguramente estás acostumbrado a desconectar todo tu dispositivo del enchufe cuando no lo estás usando, pensando que de esta manera consumirán menos electricidad? ¡Pero esto no se aplica a todos tus dispositivos!
Los precios de la electricidad están aumentando y la mayoría de la gente ha comenzado a tomar medidas para reducir el consumo de energía por cualquier medio posible. Una de estas formas para muchos ha sido desconectar de la toma de corriente los cables de sus dispositivos y electrodomésticos cuando no los están utilizando. De esta manera, esperan reducir al menos un poco su factura mensual de electricidad.
Es cierto que es muy buena idea desenchufar frigoríficos, tostadoras, cafeteras, microondas y otros electrodomésticos cuando no estén en uso (sin mencionar que es importante desconectar teléfonos móviles y computadores después de que estén completamente cargados para evitar dañar sus baterías). ¿Pero sabías que esta medida no es aplicable a todos los dispositivos? Estos son los gadgets que recomendamos mantener constantemente conectados a una fuente de electricidad.
Por ejemplo, es mejor no desconectar del enchufe un televisor OLED, ya que esto puede provocar daños graves al dispositivo. Los televisores modernos utilizan el modo de espera para actualizar automáticamente los píxeles en segundo plano. Si interrumpes este proceso con demasiada frecuencia, la calidad de la imagen se verá afectada.
Muchas personas apagan su router de Wi-Fi por la noche o en momentos en que no utilizan Internet. Pero este método tiene sus inconvenientes. Estos dispositivos están programados para mejorar continuamente la velocidad de carga y descarga. Si un router inalámbrico se desconecta con frecuencia, el proceso tendrá que empezar de nuevo y el dispositivo consumirá más energía ya que la velocidad se deteriorará. Como resultado, tu factura de electricidad no hará más que aumentar.
Y sin duda alguna no deberías desconectar del enchufe tu impresora. Si continúas desconectando la impresora, la próxima vez que la enciendas, el dispositivo decidirá que debe reiniciarse y empezará un proceso automático de limpieza, ¡y esto desperdiciará más tinta! Cuanto más rápido se acabe la tinta, más frecuentemente tendrás que comprar nuevos cartuchos. Además, las impresoras modernas están diseñadas para consumir muy poca energía y tu factura no aumentará si las mantiene conectadas en todo momento.
Ahora ya lo sabes: aunque resulte tentador desconectar todos los electrodomésticos de casa pensando que así ahorrarás dinero, esta medida puede traerte dolores de cabeza.