Tormenta solar: qué es y cómo afecta a la tecnología
Expertos de la NASA han anunciado una tormenta solar en la Tierra el martes 19 de julio. Este fenómeno podría provocar importantes alteraciones en la tecnología y comunicaciones del planeta. Pero, ¿en qué consiste exactamente una tormenta solar y cuáles son sus efectos?
¿Qué es una tormenta solar?
Una tormenta solar es un fenómeno natural que comienza con una gigantesca explosión en la superficie del Sol. Esta eyección de fuego supone una masiva erupción de energía que, al alcanzar a nuestro planeta, golpea su campo magnético, aumentando exponencialmente la radiación y actividad geomagnética.
Desde que se produce hasta que llega a la Tierra pueden pasar entre 15 y 18 horas, pero las alteraciones que produce duran horas e incluso, varios días.
Dependiendo del tamaño de la llamarada solar, las tormentas se clasifican en una escala de cinco, de G1 a G5, con consecuencias muy distintas dependiendo de su magnitud.
¿Ha habido otras tormentas solares en la historia?
Las tormentas solares son un fenómeno que se produce de forma más o menos periódica, sin embargo, no ha habido demasiadas de magnitud G5, las más destructivas.
La mayor tormenta solar registrada en la historia reciente es la conocida como Tormenta de Carrington (Carrington Event, por el astrónomo que la describió) y se produjo en el año 1859. Este evento provocó cortes y cortocircuitos en los cables del recién inventado telégrafo y desató incendios en Europa y Norteamérica. Asimismo, el enorme aumento de la actividad eléctrica hizo que se vieran auroras boreales —esas bellas y misteriosas luminiscencias provocadas por el choque de partículas emitidas por el Sol con el campo magnético de la Tierra, que normalmente solo se observan en los Polos— hasta en el Caribe.
Posteriormente, en 1921, se produjo otra importante tormenta solar que, pese a ser de menor magnitud que la de 1859, provocó destrozos mucho mayores, ya que incendió los sistemas eléctricos y sistemas ferroviarios ya más consolidados por esa época del hemisferio norte.
Dada la dimensión de sistemas eléctricos y de comunicaciones que hoy recubren todo el planeta Tierra, es posible hacerse una idea de lo que ocurriría de producirse una tormenta de tamaño similar en la actualidad: los expertos pronostican que sería catastrófica y el apagón derivado podría durar años.
¿Cómo impacta una tormenta solar en la tecnología y las comunicaciones?
Las alteraciones eléctricas producidas por una tormenta solar de grandes dimensiones serían de una gravedad incalculable.
Para empezar, las inmensas cargas de radiación podrían provocar el colapso de las comunicaciones por satélite. Esto afectaría al funcionamiento de numerosos sistemas, desde coches autónomos y aviones, hasta el pago con tarjeta de crédito o el uso de teléfonos móviles, ya que todos ellos funcionan con sistema GPS. La actividad solar podría incluso derribar los propios satélites.
Las redes eléctricas de todo el planeta también podrían cortocircuitar y arder, provocando no solo inmensos apagones, sino también incendios de gran envergadura.
Pero es que, además, una tormenta de máxima intensidad también podría provocar averías en la red submarina de fibra óptica que permite la conexión a internet a escala global, ya que esta se encuentra ribeteada de repetidores eléctricos.
En resumen, una supertormenta solar podría provocar un 'apocalipsis de internet', tal y como lo describió un estudio aparecido en 2021 sobre las terribles consecuencias de un fenómeno de estas características si no se toman las medidas apropiadas.
Los enormes avances tecnológicos de los últimos años han tenido lugar en una época de actividad solar débil, pero el ciclo solar actual, iniciado en diciembre de 2019, podría ser uno de los más fuertes de los que se tiene constancia, advirtió la doctora Sangeetha Abdu Jyothi de la Universidad de California en Irvine y VMware Research, autora de dicha investigación. Cada ciclo solar dura 11 años y se espera que este, el ciclo solar 25, alcance su punto máximo en julio de 2025.
¿Y cómo es la tormenta que alcanzará a la Tierra en julio?
El impacto de la erupción que golpeará nuestro planeta este 19 de julio creará tormentas de nivel G1 y G2, esto es, entre leves y moderadas, que podrían provocar alteraciones en algunos sistemas eléctricos, eso sí, de poca duración y efecto. En el hemisferio sur podría alcanzarse el nivel G3 pero, en cualquier caso, nada comparable en efectos a las de categorías superiores.
Pero, pese a que en esta ocasión el impacto del fenómeno apenas vaya a dejarse sentir, los expertos alertan de la necesidad de desarrollar protocolos de actuación global, ya que solo es cuestión de tiempo que se produzcan las temidas tormentas de magnitud G5. En los últimos años la NASA ha implementado un sistema de detección temprano, pero de poco servirá si la alerta no desencadena medidas de actuación coordinadas y efectivas a lo largo y ancho del planeta para prevenir unos daños que podrían ser irreversibles.