Un material revolucionario convierte el aire en agua potable y no requiere energía
Un equipo de científicos ha desarrollado un material innovador que puede capturar la humedad del aire y convertirla en agua.
Este descubrimiento innovador podría cambiar la vida de millones de personas, especialmente en áreas que enfrentan más sequías debido al cambio climático. Investigadores de la Universidad de Nueva York en Abu Dhabi, la Universidad de Jilin y el Centro de Materiales de Ingeniería Inteligente han creado un material especial que extrae agua del aire sin utilizar energía.
Esta tecnología está inspirada en animales como escarabajos y lagartos que sobreviven en lugares secos recogiendo humedad. El invento utiliza cristales para convertir la humedad del aire en agua potable.
Los cristales tienen superficies que atraen el agua en algunas zonas (hidrófilas) y la repelen en otras (hidrófobas). Esta configuración permite que el agua se acumule en las áreas hidrofílicas y fluya hacia un recipiente a través de las partes hidrofóbicas. Como no requiere energía externa, podría ser aplicado en desiertos y otros lugares con recursos limitados. También podría utilizarse en las condiciones cotidianas, lo que lo hace práctico para su uso a gran escala.
Los cristales son flexibles y autorreparables, lo que permite ciclos repetidos de captura y liberación de agua sin sufrir daños, lo que aumenta la durabilidad. Ademas, estos cristales son absolutamente transparentes, lo que permite el seguimiento en tiempo real del proceso de recogida de agua. Esta característica puede optimizar la recuperación ajustando las operaciones según las condiciones atmosféricas.
En las pruebas, los cristales recogieron hasta 15,96 gramos de agua por centímetro cuadrado en sólo una hora en condiciones de alta humedad, muy superiores a los métodos tradicionales. Esto los hace ideales para crear sistemas de agua que sean energéticamente eficientes y fáciles de usar.
El aire de la Tierra contiene un enorme recurso, unos 13.000 kilómetros cúbicos de agua. Al convertir el aire en agua, este material podría ayudar a millones de personas en regiones secas. Los científicos también creen que podría reducir los conflictos por el agua, que se espera que aumenten con el cambio climático y la creciente demanda global.