La viruela del mono (mpox) ha llegado a Europa. Esto es lo que se sabe
En Europa se ha registrado el primer caso de infección con una nueva variante de viruela simica. Esto sucedió apenas un par de días después de que la OMS declarara una emergencia internacional por el brote de este virus.
La viruela del mono (mpox) es un virus que ha afectado a la población de muchos países africanos durante los últimos años. Desde enero de 2022, se han diagnosticado más de 30.000 casos y casi 1.500 muertes en 16 países. Desde principios de año, sólo en la República Democrática del Congo se han registrado más de 500 muertes.
Recientemente, por primera vez desde que comenzó el nuevo brote a finales de 2023, una persona que vive en Europa fue diagnosticada con este virus. La persona infectada vive en Suecia y regresó de un viaje a África.
Según las autoridades suecas, la persona contagiada recibió todos los cuidados necesarios y fue aislada, por lo que no representa riesgo para el resto de la población. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no excluye que se notifiquen más casos en Europa en las próximas semanas.
Es importante saber cómo se transmite este virus. Inicialmente, mpox se transmite de monos, ardillas, ratas y otros animales a humanos después del contacto directo con sangre, fluidos corporales, lesiones cutáneas o incluso las membranas mucosas de animales fallecidos. Pero el virus también puede ser transmitido a través del contacto físico cercano entre personas, principalmente a través de diversos tipos de sexo e incluso besos.
Los síntomas de la viruela del mono son fiebre, dolor de cabeza intenso, dolor de espalda y muscular, debilidad intensa e inflamación de los ganglios linfáticos, siendo esta última una de las principales diferencias con muchas otras enfermedades similares. El peligro del actual brote es que es causado por la propagación de una nueva variante del virus que es más severa. Provoca una erupción cutánea generalizada no sólo en la boca, la cara o los genitales, sino en todo el cuerpo. La tasa de mortalidad por este virus se estima en un 3,6%.
En 2022, también hubo un brote de viruela simica en África y la OMS también declaró una emergencia internacional. Pero el brote anterior fue causado por una cepa menos peligrosa que la actual.