No está de más tener cuidado: estos medicamentos pueden traerte problemas con el calor extremo

No está de más tener cuidado: estos medicamentos pueden traerte problemas con el calor extremo

Algunas medicinas pueden causar efectos indeseables cuando suben las temperaturas.

El aumento de temperaturas durante el verano puede acarrear varios problemas, en especial durante la canícula. Pasados los 30 grados, corremos mayores riesgos de deshidratación, jaquecas, insolación o quemaduras en la piel si pasamos tiempo bajo los rayos del sol. 

Por desgracia el riesgo no termina ahí. El clima extremo puede amenazar la salud de manera oculta, ya que pueden amplificar y extender los efectos secundarios de muchos medicamentos comunes, según el portal Index. Algunos medicamentos pueden sufrir alteraciones por el calor, e inclusive perder su eficacia.

El calor prolongado puede dañar especialmente medicamentos que se conservan en frío como la insulina, la semaglutida (Ozempic), gotas para los ojos (en especial para el tratamiento del glaucoma), medicamentos para afecciones inflamatorias, y vacunas.

Por otro lado, los inhaladores para el asma pueden explotar, los EpiPens pueden funcionar mal, y así con otros medicamentos cuya situación no está tan clara.

Otros medicamentos que pueden causar problemas en caso de calor extremo son:

  • El antihipertensivo , que reduce la cantidad de líquido en la sangre, por lo que puede provocar deshidratación.
  • Los betabloqueantes para tratar enfermedades cardíacas pueden reducir el suministro de sangre a la piel, haciéndonos menos sensibles al calor peligroso.
  • Algunos antidepresivos pueden inhibir la capacidad de regular la temperatura del cuerpo.
  • La aspirina y otros analgésicos de venta libre reducen los niveles de líquidos y sodio, lo que hace más difícil afrontar las altas temperaturas .

También es importante saber que los mareos y los desmayos pueden ser causados por la combinación de calor y los efectos secundarios de los medicamentos, e incluso el consumo de alcohol puede agravarlos, según el farmacéutico Bradley Phillips de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Florida.

 

Los expertos recomiendan que cuando viajemos en coche, guardemos los medicamentos en una hielera, incluso aquellos que de otro modo no necesitarían refrigeración, ya que incluso la temperatura ambiente en el maletero o en la guantera puede ser demasiado alta para su conservación.