El inicio rápido o ‘fast startup’ es una característica de Windows 10 que te permite encender tu PC en menos tiempo al combinar el modo de hibernación y el apagado. Para ello, el equipo cierra las aplicaciones y sesiones de usuario, guarda un archivo de arranque rápido en el disco y no se apaga totalmente. Cabe mencionar que esta opción solamente se activa al dar la orden de apagado a la computadora y no al reiniciarla. Si prefieres que tu ordenador se apague completamente, a continuación, te explicamos cómo desactivar el inicio rápido en Windows 10.
Esta función nativa de Windows 10 es una forma de apagado leve y es muy útil para obtener mayor velocidad al arrancar el PC. Sin embargo, algunos usuarios prefieren quitar el inicio rápido en estos casos:
1. En el campo de texto junto a Inicio, escribe “Panel de control” y selecciona el primer resultado.
2. Selecciona Sistema y seguridad.
3. Debajo de Opciones de energía, haz clic en Cambiar las acciones de los botones de inicio/apagado.
4. Pulsa en Cambiar la configuración no disponible actualmente para habilitar la edición de las opciones de Configuración de apagado.
5. Retira el ‘check’ o palomita de la casilla de Activar inicio rápido (recomendado).
6. Haz clic en Guardar cambios para terminar.
En cualquier momento, podrás activar el inicio rápido nuevamente marcando la casilla de la opción y guardando los cambios.
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